La rinomodelación sin cirugía es una técnica que permite conseguir una nariz perfecta gracias a los pasos que ahora se describen.
El proceso al detalle
El objetivo del tratamiento es evitar tener que pasar por el quirófano y someterse a una intervención que conlleve el limado de los huesos o su fractura entre otras opciones. Los pasos de una rinomodelación son los siguientes.
Observación y análisis del problema
El profesional comprueba el estado de la nariz y observa dónde se encuentran las zonas que provocan un efecto visual poco recomendable. Salvo en casos graves provocados por traumatismos o similares, lo habitual es que se pueda corregir la anomalía rellenando áreas cercanas a las zonas afectadas.
Inyección de Volux
Consiste en gel a base de ácido hialurónico fabricado por los laboratorios Allergan (líderes en su sector). Para su composición, se usó la tecnología Vycross que permite dar volumen, afinar o restaurar cualquier área cercana a la nariz.
Lo habitual es que una hidratación de la piel pobre afecte a las áreas que rodean la nariz. Igualmente, la pérdida, con el paso de los años, del colágeno y la elastina inciden en la falta de elasticidad de la piel y en la aparición de depresiones diversas que pueden corregirse inyectando la antedicha sustancia. Este paso es totalmente indoloro ya que se usa anestesia local.
Los mejores resultados
El ácido hialurónico lo produce el cuerpo de manera natural por lo que nunca provocará una reacción adversa en el paciente. El organismo lo acepta como propio y equilibra sus niveles a los pocos días del tratamiento.
Tras la lógica inflamación inicial, provocada por los pinchazos necesarios para aplicar el gel, en unas dos semanas se pueden apreciar ya los cambios deseados y comenzar a lucir una nariz acorde a los gustos personales del paciente.
Siempre bajo supervisión profesional
Dadas las características del tratamiento, resulta indispensable confiar en profesionales con experiencia que conozcan los resultados del proceso. No se trata solo de rellenar con un gel, sino también de equilibrar las distintas zonas de la cara teniendo el conocimiento necesario que permita adelantarse a los posibles resultados del proceso.
Solo el estudio previo de una profesional del sector de la estética ayudará a elegir la cantidad de gel a utilizar, dónde insertarlo y cómo conseguir un resultado perfecto. El objetivo de la intervención es rejuvenecer ligeramente la imagen personal, pero siempre teniendo en cuenta las características específicas de la persona.
Así, la rinomodelación sin cirugía es una solución eficaz para conseguir que la nariz siga siendo el punto de referencia para mantener la expresión facial correspondiente. Confiar en profesionales permite conseguir un óptimo resultado y dejar atrás complejos que terminan por restarle calidad de vida al paciente.
